A dos días del deceso del cantante de 27 años, la actriz agradece las muestras de apoyo y pide oraciones por su hijo.
CIUDAD DE MÉXICO - A menos de 48 horas del deceso de Julián Figueroa, su madre, la actriz Maribel Guardia, comparte cómo se siente tras la pérdida de su hijo y detalla las razones por las que el funeral se realizó en la más completa intimidad.
Acompañada por la viuda de su hijo, Ime Garza Tuñón, la actriz rompió en llanto en varias ocaciones al exponerse por primera ocasión ante los medios de comunicación tras la muere de su único hijo, a causa de un infarto aguado al miocardio y fibrilación ventricular.
La actriz agradeció las muestras de apoyo y cientos de flores que ha recibido, además de que pidió oraciones para Julián, quien murió a días de cumplir 28 años, el 2 de mayo.
También explicó que no realizará ningún servicio funerario público porque ni su nuera ni ella deseaban que su nieto, José Julián, de 5 años, lo viera en un féretro y pasara por lo mismo que él con la muerte de Joan Sebastian. Por ello, solo celebró una misa de forma privada al interior de su casa.
“Necesitábamos vivir este dolor en familia con gente que realmente conoció y amó a Julián, realmente el día de ayer fue muy importante para nosotros. Vivir este duelo que yo sé que apenas está empezando, nos falta mucho camino por recorrer", expresó. "Era mi amor, mi niño de mis ojos y ha sido muy duro perderlo, pero Dios me lo dio y Dios me lo quitó lo entrego en sus manos. Tenía tanto por recorrer, estaba empezando su carrera".
Contó que el lunes, el padre José de Jesús acudió a su casa para realizar una misa a la que sólo acudió la familia del joven cantante, tanto por el lado paterno como de su lado, ya que viajaron desde Costa Rica para acompañarla. Hasta este martes, dijo, fue cuando se permitió la entrada a algunos famosos que le manifestaron su apoyo.
“RECEN POR MI HIJO Y POR NOSOTROS”
La actriz y cantante que actualmente protagoniza la obra de teatro "Lagunilla mi barrio", abundó sobre las razones que la llevaron a mantener todo cerrado a los medios. Dijo que debido a la experiencia de su único hijo en el funeral de su padre, habría decidido junto a Imelda Garza Tuñó no realizar ningún servicio funerario y cremar el cuerpo a horas del deceso.
Hasta el momento, indicó, las cenizas permanecerán en su casa junto a un altar de la Virgen de Guadalupe y las flores que ha recibido.
"No quiero deshacerme de sus cenizas", compartió. "Se lleva el amor de esta familia que lo amó con el alma, le doy gracias a mi esposo Marco por todo el amor y educación que le dio porque siempre fue incondicional con él. Tuvo un padre que le duró muy poco también, pero Marco funcionó como un padre maravilloso para él y tenían una relación increíble".
"Les pido a todos los que me están viendo que recen mucho por mi hijo y por nosotros para que podamos tener valor. Le pido a Dios que a sus hijos los vean crecer, casarse, tener nietos y triunfar, que los entierren a ustedes porque no hay dolor más grande que enterrar a un hijo", dijo.
"Tengo que entender que el amor que siento por mi hijo va a durar hasta el día que me muera y que nos deja su luz, sus canciones, todas las cosas lindas que tengo de él en mi corazón, tantos recuerdos, su primer sonrisa, sus besos, sus primeros pasitos, todas las cosas que viví con mi hijo tan linda".
