SACRAMENTO, California — El demócrata Gavin Newsom gana fácilmente un segundo mandato y retiene su puesto como gobernador de California.
Esta es la segunda victoria estatal decisiva para Newsom en apenas un año. En septiembre de 2021, rechazó fácilmente un intento de echarlo de su cargo alimentado por la ira por sus políticas pandémicas.
“Creo que se convierte en uno de los demócratas de más alto perfil en el país, dado que es muy probable que haya un gobierno dividido en Washington D.C., y los demócratas buscarán a todos y cada uno de los aliados para promover su agenda”, dijo Matt. Barreto, profesor de ciencias políticas de la UCLA. “Y el gobernador Newsom tendrá una plataforma muy grande de California para hacer eso”.
Fue un resultado esperado en el estado más poblado del país, donde hay casi el doble de votantes demócratas registrados que republicanos.
El candidato republicano, el senador estatal Brian Dahle, no pudo recaudar suficiente dinero para llevar a cabo una campaña eficaz. Dahle, un agricultor de la esquina noroeste rural del estado que también es propietario de una empresa de camiones pasó las últimas semanas de la campaña tratando de llamar la atención conduciendo un camión por todo el estado con una gran pancarta de campaña.
Sin amenazas políticas en casa, Newsom pasó el último año firmando una serie de leyes liberales que podrían ayudarlo a ganarse a los votantes demócratas en unas primarias presidenciales disputadas. Eso incluyó la promulgación de más de una docena de leyes destinadas a hacer de California un santuario para mujeres en otros estados que buscan abortos ahora que la Corte Suprema de EE. UU. anuló Roe v. Wade.
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Ordenó a los reguladores estatales prohibir la venta de la mayoría de los autos nuevos a gasolina para el 2035. Sus presupuestos han pagado para que cada niño de 4 años asista al jardín de infantes de forma gratuita y cubrirá los costos de atención médica de todos los inmigrantes de bajos ingresos en California que viven en los Estados Unidos sin permiso legal.
Pero una posible campaña presidencial de Newsom tendría que responder por una serie de los problemas más persistentes de California, incluida una población de personas sin hogar en constante expansión y un aumento de la delincuencia que ha contribuido a una sensación general de inquietud entre los votantes. Mientras tanto, la inflación galopante solo ha aumentado el alto costo de vida del estado, contribuyendo a la primera disminución de la población de California y la pérdida de un escaño en el Congreso.
Newsom se ha comprometido a abordar algunos de esos problemas de inmediato en su segundo mandato, prometiendo convocar una sesión especial de la Legislatura estatal el próximo mes para aprobar un nuevo impuesto sobre las ganancias de las compañías petroleras como una forma de combatir los precios récord de la gasolina en el estado. Pero el próximo mandato de Newsom comenzará con la recaudación de impuestos estatales por debajo de las expectativas, lo que generará una posible ronda de recortes presupuestarios impopulares.
A nivel nacional, Newsom ha buscado el papel de mensajero del partido, utilizando parte del dinero de su campaña para pagar anuncios en Florida y Texas dirigidos a los gobernadores conservadores de esos estados. Newsom ha dicho repetidamente que su objetivo es renovar la estrategia del Partido Demócrata, instando a otros a seguir su ejemplo de un estilo más agresivo.
“Creo que se convierte en uno de los demócratas de más alto perfil en el país, dado que es muy probable que haya un gobierno dividido en Washington D.C., y los demócratas buscarán a todos y cada uno de los aliados para promover su agenda”, dijo Matt. Barreto, profesor de ciencias políticas de la UCLA. “Y el gobernador Newsom tendrá una plataforma muy grande de California para hacer eso”.
Los constantes golpes a DeSantis, Abbott y otros republicanos destacados solo han aumentado las especulaciones sobre el futuro de Newsom. Algunos han mencionado su nombre como un reemplazo potencial para el presidente Joe Biden en 2024 o una candidatura en 2028. Newsom ha negado repetidamente ambos, diciendo que respalda a Biden y quiere que la vicepresidenta Kamala Harris, una amiga y compañera californiana, sea presidenta.
Durante el único debate del mes pasado sobre la contienda por la gobernación, Newsom prometió servir los cuatro años si una vez era reelegido, una promesa que muchos políticos han hecho y roto en el pasado.
En cuanto a su próximo mandato como gobernador, Newsom ha dicho que se centrará en los extremos: “sequía extrema, clima extremo, polarización extrema en nuestro cuerpo político en lo que respecta a la preservación y protección de la democracia”.
“La revolución de los derechos ha retrocedido en tiempo real en tantos estados rojos, todas esas cosas son muy importantes”, dijo Newsom después de un debate el mes pasado. “Y este estado tiene más que perder, más que ganar, que cualquier otro estado del país”.
