CABO CAÑAVERAL, Florida. — El lanzamiento de la cápsula Boeing Starliner se canceló nuevamente, a solo minutos de su salida este sábado.
Dos astronautas de la NASA se encontraban a bordo de la cápsula Starliner de la empresa, en espera del despegue, cuando la cuenta regresiva se detuvo automáticamente a los 3 minutos y 50 segundos por el sistema informático que controla los últimos minutos antes del despegue.
A tan solo un instante de despegar la tarde del sábado, no hubo tiempo para reparar el último desperfecto, por lo que todo se canceló. De momento no estaba claro por qué las computadoras interrumpieron la cuenta regresiva.
La Nasa y Boeing programaron un nuevo intento de lanzamiento para este domingo.
Los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams permanecieron en sus asientos de la cápsula, a la espera de que los técnicos les ayudaran a salir. lanzamiento para este domingo.
Los funcionarios de la compañía y la NASA habían dicho que las revisiones intensivas indican que la cápsula Starliner podía llevar con seguridad a dos pilotos de prueba a la Estación Espacial Internacional, a pesar de una fuga en el sistema de propulsión.
La NASA desea contar con una alternativa a SpaceX, que ha transportado astronautas durante cuatro años.
EEUU
La pequeña fuga de helio fue descubierta después del primer intento de lanzamiento el 6 de mayo, que fue frustrado por un problema no relacionado con el cohete que ahora está solucionado.
Los ingenieros sospechan que se trata de un sello de goma defectuoso del tamaño del botón de camisa, y dicen que incluso si la fuga empeora, podría solucionarse en vuelo. Todos los demás sellos de la cápsula estaban en buenas condiciones, dijo el gerente del programa de tripulación comercial de la NASA, Steve Stich, lo que llevó a los gerentes a apuntar al 1 de junio para el lanzamiento.
El lanzamiento de esta cápsula será el tercer vuelo de prueba de Starliner. Las demostraciones en 2019 y 2022 no tenían a nadie a bordo. Boeing tuvo que repetir el vuelo vacío debido al software y otras fallas la primera vez.
Según Stich, si no fuera por la válvula defectuosa del cohete Atlas V que detuvo la primera cuenta regresiva, Starliner habría despegado desde Cabo Cañaveral a principios de mayo y la fuga se habría detectado por primera vez en órbita. Los controladores de vuelo habrían controlado la fuga y los astronautas habrían estado a salvo, subrayaron los funcionarios. El helio se utiliza para presurizar las líneas de combustible del sistema de propulsión, que maniobra la cápsula en vuelo.
Los ingenieros ahora saben la ubicación de la fuga y "eso nos ayudará a mejorar el sistema en el futuro", dijo el gerente del programa de Boeing, Mark Nappi.
"Recuerden, este es un vuelo de prueba. Todavía estamos aprendiendo", dijo Nappi a los periodistas.
La identificación de la fuga de Starliner llevó al descubrimiento de otro problema: "una vulnerabilidad de diseño" en el sistema de propulsión en el improbable caso de una serie de fallas, dijo Stich. El equipo ha desarrollado métodos alternativos para sacar la cápsula de la órbita de manera segura al final del vuelo si surgen tales problemas, agregó.
“No vamos a volar hasta que estemos seguros de que estamos a salvo”, dijo el administrador asociado de la NASA, Jim Free.
La cápsula Starliner de Boeing ya lleva años de retraso en el transporte de astronautas a la Estación Espacial Internacional para la NASA. SpaceX ha estado lanzando tripulaciones desde 2020. La NASA quiere que ambas compañías ofrezcan el servicio de taxi para que puedan respaldarse mutuamente.