La suma de $3.5 millones le fue otorgada a una víctima de abuso sexual por un sacerdote católico, quien lo habría violado en repetidas ocaciones como penitencia tras confesarse en Wayne, Pensilvania.
El acuerdo legal se llevó a cabo entre la Arquidiócesis de Filadelfia y los abogados del afectado, quien al momento de los ataques, tenía solamente 14 años.
El acusado, identificado como John Close, dirigía la parroquia St. Katherine's of Sienna cuando tuvo intercambios con este menor en particular. El chico acudía al catecismo de la iglesia. Las violaciones ocurrieron en el 2006 y no fue hasta el 2008 que el sobreviviente las reportó.
Según la premisa, Close violó al niño diciéndole que era necesario para ser librado de sus pecados advirtiéndole que no le contara a nadie porque sino sería condenado para siempre.
El repertorio de acusaciones contra Close, quien murió en el 2018 bajo buena reputación de retirado y con el título de "monseñor", fueron solapados por la Iglesia Católica por varias décadas.
En la década de 1970, el religioso fue reasignado a otra parroquia porque mantenía niños durmiendo en su habitación de la rectoría.
En el 2004, otro sobreviviente de agresión sexual infantil informó a la arquidiócesis sobre las agreciones de Close cuando era monaguillo en el 1960 en la parroquia de Cristo Rey, pero la entidad católica desestimó la misma citando “inconsistencias” en el caso.
Una víctima adicional dio a conocer que fue abusado en el 2011 por Close cuando cursaba en la secundaria Archbishop Wood, donde el atacante era el director.