HOUSTON – Una verdadera novela. Así se puede catalogar la situación vivida por el “dreamer” Jaime Ávalos, quien se encuentra “atrapado” en México, luego de acudir al consulado de Estados Unidos en Ciudad Juárez para tramitar un ajuste de estatus.
Ahora se sabe, que tanto Ávalos como la organización Carecen -que lo asesoró en su caso migratorio- desconocían un secreto de familia que solo se supo después del viaje a México: este dreamer es adoptado, por lo que su identidad -aparentemente- no coincide con los registros que tiene el gobierno de Estados Unidos.
Otro elemento que pudo haber incidido en la negativa del gobierno de EEUU frente a la solicitud de residencia permanente tiene que ver con el hecho de que Ávalos no solicitó un permiso de viaje otorgado por el Servicio de Inmigración y Ciudadanía que le hubiera podido servir como garantía para que pudiera regresar con su familia a Houston.
La esposa de Ávalos, Yariana Martínez, asegura que esa opción nunca se les ofreció, algo en lo que no coinciden con CARECEN.
Ahora, el gobierno de EEUU está pidiendo mayor documentación a Ávalos y su familia para sustentar el ajuste de estatus a través de Yariana, quien es ciudadana estadounidense.
Avalos se enfrenta a un castigo de 10 años sin poder regresar por el hecho de estar en el país de forma ilegal por más de 1 año.