WASHINGTON - Dos personas que, según los fiscales, estaban motivadas por una ideología supremacista blanca, fueron arrestadas bajo cargos de haber usado la aplicación de mensajería Telegram para alentar crímenes de odio y actos de violencia contra minorías, funcionarios gubernamentales e infraestructura crítica en Estados Unidos, según informó el lunes el Departamento de Justicia.
Los acusados, identificados como Dallas Humber y Matthew Allison, enfrentan 15 cargos federales en el Distrito Este de California. Están acusados de solicitar crímenes de odio y el asesinato de funcionarios federales, distribuir instrucciones para fabricar bombas y conspirar para brindar apoyo material a terroristas, entre otros delitos.
Humber, de 34 años, de Elk Grove, California, y Allison, de 37 años, de Boise, Idaho, fueron arrestados el viernes. Humber se declaró no culpable de los cargos en un tribunal de Sacramento el lunes. Su abogado, Noa Oren, se negó a hacer comentarios sobre el caso el lunes por la tarde después de la lectura de cargos.
No quedó claro de inmediato si Allison tenía un abogado que pudiera hablar en su nombre.
La acusación formal los señala de liderar Terrorgram, una red de canales y chats grupales en Telegram, y de solicitar a los seguidores que ataquen a los enemigos percibidos de los blancos, edificios gubernamentales, instalaciones energéticas y objetivos "de alto valor", como los políticos.
"La acción de hoy deja en claro que el departamento hará que los perpetradores rindan cuentas, incluidos aquellos que se esconden detrás de las pantallas de las computadoras, al intentar llevar a cabo violencia motivada por prejuicios", dijo la fiscal general adjunta Kristen Clarke, la principal funcionaria de derechos civiles del Departamento de Justicia, en una conferencia de prensa.
Las exhortaciones de la pareja a realizar hechos violentos incluían frases como "Actúa ahora" y "Haz tu parte", y a los usuarios que cometían actos para promover la supremacía blanca se les decía que podían ser conocidos como "santos", afirmaron los fiscales.
Local
Los funcionarios del Departamento de Justicia dicen que Humber y Allison usaron la aplicación para transmitir instrucciones para fabricar bombas y distribuir una lista de posibles objetivos para el asesinato (incluido un juez federal, un senador y un exfiscal de Estados Unidos) y para celebrar actos o complots de usuarios activos de Terrorgram.
Entre ellos se incluyen el apuñalamiento de cinco personas el mes pasado frente a una mezquita en Turquía y el arresto en julio de un joven de 18 años acusado de planear un ataque a una subestación eléctrica para promover puntos de vista de la supremacía blanca. En el ataque de Turquía, por ejemplo, los fiscales afirman que el culpable, la mañana del apuñalamiento, publicó en un chat grupal: "Ven a ver cuántos humanos puedo purificar".
Un documental de 24 minutos que ambos produjeron, "White Terror", documentó y elogió unos 105 actos de violencia supremacista blanca entre 1968 y 2021, según la acusación.
"El riesgo y el peligro que presentan son extremadamente graves", afirmó el fiscal general adjunto Matthew Olsen, el principal funcionario de seguridad nacional del Departamento de Justicia, sobre los usuarios de Terrorgram. Agregó: "Su alcance llega tan lejos como el internet debido a la plataforma que han creado".
Remi Vaughn, portavoz de Telegram, dijo: "Los llamados a la violencia no tienen cabida en la plataforma de Telegram. Los moderadores eliminaron varios canales que usaban variaciones del nombre 'Terrorgram' cuando fueron descubiertos hace años. El contenido similar está prohibido siempre que aparece".
Telegram es una aplicación de mensajería que permite conversaciones individuales, chats grupales y grandes "canales" que permiten a las personas transmitir mensajes a sus suscriptores. Aunque se utiliza ampliamente como herramienta de mensajería en todo el mundo, Telegram también ha sido objeto de escrutinio, incluido un hallazgo de investigadores franceses de que la aplicación ha sido utilizada por extremistas islámicos y narcotraficantes.
El fundador y director ejecutivo de Telegram, Pavel Durov, fue detenido por las autoridades francesas el mes pasado, acusado de permitir el uso de la plataforma para actividades delictivas. Durov respondió a las acusaciones con una publicación la semana pasada en la que decía que no debería haber sido objeto de ataques personales y prometía intensificar los esfuerzos para combatir la delincuencia en la aplicación.
Escribió que, si bien Telegram no es "una especie de paraíso anárquico", el aumento de la cantidad de usuarios ha "causado problemas de crecimiento que han facilitado que los delincuentes abusen de nuestra plataforma".
