BUENOS AIRES - Una persona de 64 años murió en Argentina a causa de coronavirus, confirmaron las autoridades sanitarias el sábado, convirtiéndose en el primer deceso relacionado con el brote en América Latina.
“Se confirmó el fallecimiento de un paciente, con diagnóstico de COVID-19” residente en la ciudad de Buenos Aires, afirmó el ministerio de Salud de la Nación argentina en un escueto comunicado. El paciente presentaba antecedentes previos, como diabetes, hipertensión, bronquitis crónica e insuficiencia renal, añadió el comunicado.
El hombre había viajado recientemente a Europa y el 28 de febrero presentó síntomas como tos, fiebre y dolor de garganta. Se presentó a consulta cuatro días después, cuando fue internado en la unidad de cuidados intensivos de un hospital público de la la capital, necesitando asistencia respiratoria mecánica, confirmaron las autoridades.
La víctima no se encontraba entre los 8 casos confirmados en el país, sino que se trató de una novena infección que confirmó el instituto a cargo de las pruebas en Argentina la tarde del sábado.
“El servicio de virosis respiratoria INEI ANLIS Malbrán ha procesado nueve muestras arrojando como resultados ocho negativas y una positiva, siendo esta la muestra que confirma el fallecimiento de un paciente con diagnóstico de COVID-19”, señala el comunicado oficial.
Se están realizando una investigación epidemiológica para detectar también a aquellas personas con las que tuvo contacto, informaron las autoridades.
Según los medios argentinos, el hombre de 64 años regresó recientemente de Francia y murió en el hospital Argerich, en el barrio de La Boca.
Paraguay, Chile, Argentina, México, Brasil, Ecuador, Perú, Colombia y Costa Rica son los países de Latinoamérica con casos confirmados del nuevo coronavirus.
De acuerdo con los últimos datos oficiales, a nivel mundial hay más de 101.000 contagiados y más de 3.400 fallecidos.
La Organización Mundial de la Salud declaró este martes que Latinoamérica debe aprovechar el hecho de que sea una de las regiones del mundo con un número muy limitado de casos de coronavirus para preparar una "estrategia de contención agresiva" que permita un control rápido si el virus se expande.
